De la desdicha
a la fortaleza.
Así como el amor
y las alegrías,
los dolores
y las tristezas,
no se viven
dos veces
con la misma
intensidad.
Mente bizarra en una sociedad bizarra... que bizarro es todo, lame estos deseos, mientras yo me follo tu conciencia... no la cogeré, más bien la violaré, espero que tal acto sea en contra de tu voluntad, así después reiré y encenderé un cigarrillo...