miércoles, 22 de diciembre de 2010

Locos.

Intentar que veas mis ideas y entiendas mis letras es tan complicado como dejar de odiar este viejo mundo del suicidio…
Aunque tus ojos sean mudos y las melodías que se escapan de tu cuerpo bailen en mi conciencia generando la total incomprensión, sé que nuestras almas tienen que reencontrarse.
Te apretaré con tanto odio y amor que no podrás escaparte…

lunes, 13 de diciembre de 2010

Cosas.

En diciembre las calurosas noches santiaguinas provocan una leve impresión…
El ocaso del año está venidero, lo huelo… todo de pronto de terminará.
Este año me ha dejado en la banca rota, no queda ya nada dentro de mí para entregar… ni odio, ni amor, ni felicidad, ni desgano, ni preocupación, ni dolor, ni angustia, ni pasión, ni aflicción, ni mentiras, ni verdades, ni realidad, ni belleza, ni fealdad…
Todo termina para volver a comenzar… no existe el final definitivo, ese final tan absoluto y lineal no tiene cabida en nuestra realidad.

sábado, 4 de diciembre de 2010

De la ausencia a la melancolía


prefiero odiarte toda la vida a amarte en la ausencia.
El egoísmo en las letras está claro,
¿mas no es tu ausencia también un egoísmo latente?
eso es lo que mi conciencia entiende.

Las ganas de encontrarte sin saber hacerlo
/ni lograrlo/
convirtió este amor florido
En un odio podrido, mal oliente…

Una vez pensé que sólo en tus brazos y en tu cama
Mi bestia descansaba…
lo era /al menos/
en los mejores tiempos…

La realidad distaba del recuerdo,
Fui a tus brazos 
una noche de risas
desvelos, alcohol y luces blancas…
no encontré nada…
sólo un torpe zigzagueo y 
a un desconocido hambriento 
de mi cuerpo y del instante.

martes, 30 de noviembre de 2010

Talante

De la desdicha 
a la fortaleza. 

Así como el amor
y las alegrías,
los dolores 
y las tristezas,
no se viven 
dos veces 
con la misma 
intensidad.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

verás.


Si miras con paciencia... 
si alejas las nubes grises,
si tus ojos se apartan del dolor, 
de la ira y la desesperación...
si sanas los recuerdos 
y reinventas las ganas, 
el deseo y el amor...
si te atreves 
y la cobardía desaparece, 
entonces el valor renacerá 
y florecerá
dentro del desierto, 
alejando el pasado 
y viviendo el presente.
Verás el arco iris 
que se ha estampado dentro de ti 
y te alienta
en la in-conciencia 
para creer en lo que has querido 
apartar de tu camino
y es lo que siempre te hace volar,
te hace libre. 

sábado, 20 de noviembre de 2010

Ausencia


Desnuda en mi cama,
como dibujando
un cielo imaginario
con la mirada hacia el techo.
Busco un poco de fragilidad
y todos los sueños 
que te robaste.

En medio de un montón de lagrimas
ahogada en un maldito insomnio,
eres el clavo que se oxidó
en mi pecho.

cada nueva situación 
de ausencia,
borra otra mueca de 
felicidad.

buscándome,
como una mujer,
entre muchas otras,
no he hallado mi cordura.

Te llevaste partes de mi cuerpo,
te llevaste
esa calidez
que hubo en mis labios...

Mis ojos sólo desprecian,
ya no iluminan,
por las noches,
tu cuerpo húmedo

Soy una miserable gota perdida
entre océanos descomunales
y en los pantanos
busco 
el cause de algún río...


domingo, 7 de noviembre de 2010

...


me acuerdo cuando...
mi aliento de cloaca
te alejaba,
me alejaba a mì de mì
por tantas cosas; nunca la verguenza.
Y mi voz se hacia
tèmpano de hielo
màs frìo que ese mismo hielo...
de todos los àrticos que han habido en las historias.
Mi actitud, recuerdo, te dolìa tragarla
yo, el fome de siempre
te querìa màs...
se secaban mares de hecho
en ese querer;
pero algo de mi persona
te dolìa tragar.
Serìa el crìptico cariño
que ni los dioses entendieron al igual que tù,
ese capricho de amor corrupto
que me hacìa verte en todo.
Me acuerdo me acuerdo.

[Aquellas letras no salieron de mi mente, pero son mías... un pitiao me las regaló
y están aquí para inmortalizar nuestra historia]

martes, 12 de octubre de 2010

tu ardiente ausencia.


Estoy buscando una salida
/o entrada/ 
a nuestra realidad.

He bosquejado con mi lengua 
una puerta
en las paredes 
de tu cuerpo extraño...

Me he movido por tus calles 
y me he hidratado con tu saliva,
de tu sudor después del sexo...

vuelvo a tocar 
-con los ojos cerrados-
y
con la punta de mis dedos,
tus bellos púbicos.

Mis labios están rojos, 
brillantes, 
ardientes, hambrientos...

Veo tus ojos exaltados,
los sonidos animalescos
que se escapan de tu boca,
tu nariz.

Tus manos apretando mis muslos,
cortando la piel,
enrojeciendo, quemando...

Me extiendo en la cama,
respiro profundo
y veo tu cabeza enredada entre mis piernas,
humedeciendo mi vagina.

Veo noches de excesos 
que terminaron
en una habitación
y escenas post-porno...

-estábamos locos-

tú piel tuvo un perfume que embriaga,
tú lengua quemó lugares
prohibidos de mi cuerpo...

-loca yo estaba-

Te devoré en tantas ocasiones
que tuve que construirte otro cuerpo.

-el loco eras tú-

la melancolía de querer enredarme 
en tu cabello negro, ondulado,
y tu barba áspera, 
rasgando mi piel,
mi pubis,
mi pecho,
mi espalda,
mis pies...
mantienen un fuego
que /pese a la ausencia/
aún no puedo apagar.

martes, 5 de octubre de 2010

El reencuentro con el puerto.




me encuentro ubicada en las alturas de un micromundo que alimenta las imágenes que armé desde que me decidí a volar entre tus calles...arde mi piel con los descontrolados vientos que acarician desesperados cada rincon del cuerpo y la conciencia...
Melancolicas melodías decoran el paisaje particular que posees...una vez que atrapas a los individuos en tus cerros es imposible decir adios...al recorrer tu cintura bailo con tu aroma a pueblo, con las cicatrices del ayer, de un mal amor encarnado en tus paredes...de tus ojos brillan en las  noches cantineras, como una madeja de estrellas atrapadas, disonantes...
En cada centimetro de tu cuerpo se estampa una historia que recojo entre palabras que se discurren en mis ideas... mi extraño corazón se enfurece por respirar tus sabores coloridos y maltratados por la historia...
La vida aquí es un sueño, una pequeña historia en la cantina... la vida y un vaso de vino, de tambores, sonrisas y llantos...pasión y agudos momentos de irracionalidad, donde mi ropa desaparece y me encuentro poseída por Dionisio y nadando entre tus olas y la lluvia...
Un olvidado poema punk.

martes, 21 de septiembre de 2010

Momentos brigidos.

Madejo de estrellas
y un cielo nocturno desierto…
Mis emociones se equilibran
en una cuerda.
Sé que mi vida es intensa,
Y la ilusión mentirosa
el peor alimento para ella…

Pasan las horas
y jamás llega el instante del (re)encuentro.
Te envío mensajes desde la luna
y las respuestas se pierden
en las constelaciones que desconozco…

Siento un horrible temor
de ver la realidad…
Tengo miedo de lo que mis ojos puedan mirar…
Hay tantas cosas que mi mente ha digerido
y ha guardado con cautela,
que al instante del triangulo
se tropieza fuertemente
sobre palabras que jamás se dijeron,
sobre una mentira hueca.

Cuando al fin el sol (re)apareció,
tenía tus manos en mi cuerpo
/dando tranquilidad/ y
mientras ardían las caricias,
sabía que esas manos
/en algunos instantes/
estarían sobre otros caminos…
sobre otro valle,
dando una tranquilidad muerta.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Reconocer...


Solo se puede re-conocer algo o alguien que ya conoces… Mirar a los ojos, recorrer lo que hay más allá de sus ojos, con lo profundo de nuestro razonamiento, y pese a ello, entender que este iluminado ser es tan o más fascinante que en algún pasado ya conocido.
Reconocer entre la multitud a quien es capaz de brindarte una felicidad explosiva es una habilidad que se adquiere al experimentar sentimientos y pasiones límite, pues, no se puede construir una historia solo de dulces, algodones y fiestas, una historia se construye cuando vuelas muy alto y te caes, te caes tan hondo que en algún momento piensas jamás saldrás de lo profundo.

Volver a conocer es sin duda lo más noble que he leído en mucho tiempo.

domingo, 22 de agosto de 2010

De la miseria a la fuerza humana.


Estar bien con uno mismo significa dejarse acompañar por personas - seres - que le brinden un bien al espíritu, al espíritu propio. La miseria del mundo entero no puede contra un solo hombre, contra el hombre que reconoce y entiende su relación consigo mismo y con el exterior, con el contexto y su historia. Tomar la vida, asumir - y a su vez – luchar es lo que hace que el hombre común llegue a un nivel superior.
Hablar de la armonía y bien estar propio y al mismo tiempo, preocuparse demasiado de ello y mencionarlo en reiteradas ocasiones es ególatra y primitivo - LA INVOLUCIÓN ES UNA ENFERMEDAD-

miércoles, 18 de agosto de 2010

Renacer...


Una persona puede renacer más de una vez… y tal vez más que las persona… los seres vivos en su totalidad pueden decidirse a renacer. En el caso de los seres humanos, la metáfora radica principalmente en la intención que tengamos como individuos de reconstruirnos nacer, vivir,sentir, maldecir, escupir y volver a comenzar, pero más entendidos en la materia de la vida.
El renacer implica necesariamente dejar cosas atrás, desprenderse de lo simbólico y lo material… tal vez por eso sea tan difícil el proceso, para eso hay que tener voluntad.
Es de día y jamás escribo a estas horas… -en vez de que el día de haya hecho noche, fue la noche la que se hizo día-. Tal vez sean los primeros indicios de mi renacer.

viernes, 6 de agosto de 2010


Solo queda un cigarrillo y es tarde… la madrugada me calló encima y tengo dos opciones, ¿enciendo o no el cigarrillo? La pregunta se origina en los pensamientos ¿o en los deseos?… 
Hay tantas cosas acá dentro que meditar en el balcón de mi pieza, que da a la casa de mi vecina y a la botillería del viejo gordo al cual detesto, podrá ayudarme…
Hay ciertas veces en que uno se ve hacia dentro y pareciera ser que está todo claro, empero, ¿qué pasa cuando está todo claro y la confusión parte desde el sujeto que te está fuera de ti?, que no eres tu, que es otro que te mira y toca tus manos… la solución estuvo al enfrentar al otro… pero al enfrentarlo todo a quedado peor, peor para mi que creí real las ideas que construyó mi mente, pisé sobre la nada que repentinamente se volvió toda la realidad…

martes, 3 de agosto de 2010

Meditaciones platónicas

A veces los recuerdos tienen
rostros y nombres...
a veces las miradas
imponen mensajes
cargados de ayer,
de hoy y tal vez de mañana.

Por minutos
el mañana se transforma en siembras
sobre el aire...

Podemos coger el aire con la piel,
pero jamás lo aprehendemos
con los ojos.
Símbolo de verdad y luz...

La luz no facilita tal posibilidad
de descubrir el ser.
Entonces:
¿el intelecto puede ser la luz de las ideas?

miércoles, 21 de julio de 2010

El correr de la conciencia


Hasta qué punto los errores de nosotros, los seres humanos, nos causan agobio diario, son consecuencias de alguna causa que, al parecer, jamás paran. En este sentido, son cadenas que se van formando y que nos liquidan, nos aplastan. Hoy recordé una frase: “lo que nos separa del animal común es nuestra capacidad de razonar, de pensar”. Sabias palabras, pero también hay otra gran características que nos separa de aquellos seres sin razón, aquella es nuestra facilidad para cometer errores, esa facilidad con que la que destruimos todo, de pasar por encima de los otros, de creernos mejor que el otro ¿Cuánta miseria a de existir a mi alrededor?... muchísima creo, más de lo que yo pudiese imaginar – y cabe decir que tengo mucha imaginación -. 
Escucho canciones en donde pueda encontrar alguna respuesta o, tal vez, alguna explicación a tanta acción errada que quizá sea la estructura humana natural, ¿seremos malos por naturaleza?, no quiero pensar de que esa es precisamente la verdad. He tratado de construir un discurso muy alejado del los principios Hobbianos, porque aunque sea una misántropa creo que somos algo a lo que debemos tratar de humanizar.
Nos pesan tantas cadenas… pero la cadena que más nos pesa es la de no ser humanos. Creamos un universo mentiroso con nuestras ideas, pensamientos y luego ocupamos la razón para justificarlas lógicamente, justificar, a través de nuestras ideas, cada una de nuestras acciones, para sentirnos bien con nosotros, con nuestra conciencia, con lo que hacemos.
Es tarde, el día como siempre se hizo noche, aquella que te aplasta, solo llega de repente. Estoy sola y lo digo con la profundidad que abarca esa palabra. He querido, por ello, pensar en la capacidad de perdonar, es decir, qué capacidad tenemos nosotros de avanzar, de curar heridas y volver a creer, volver a levantar los pilares de tu casa. Somos hombres y mujeres, todo vuelve a lo mismo, tal vez si las cosas fueran equilibradas, fueran recíprocas, fuéramos libres, podríamos escribir historias más gratas o, al menos, más amables.
Perpleja... mi cabeza piensa en qué pasará con las verdades: la verdad es el hecho que está ahí, que habla por si solo o es más bien el fenómeno que se nos aparece, la interpretación que como sujetos tenemos de esta realidad tan nebulosa, tan encubierta, llena de simbolismos, en el presente y con los ojos en el  futuro. Estamos habitando el contexto, somos producto de lo que fuimos, así podemos entender porqué somos lo que somos aquí y ahora. Es engorroso hablar así, mi intención no es sino la de entender un poco, más que el de confundir. Me llena de cólera darme cuenta que hemos vivido queriendo vivir bien y no hacemos nada aquí para cambiar el ahora, nos equivocándonos minuto tras minuto, ¿qué es vivir bien?, ¿qué es hacer lo justo?, una vida perfecta te espera si haces las cosas que te dice la tele, que ella te impone como importantes, trascendentes. Volvemos al inicio: error. No hay más.
Ahora bien, qué pasa con nuestra identidad, estaremos limitados toda nuestra existencia real a no ser más que el reflejo de una idea de sujeto paupérrima, poco real, poco humana. No obstante, a pesar de todo, hay algunos que desafían las imposiciones, se cuestionan el estado de cosas, intentan cambiar en algo el rumbo de sus vidas y, con su ejemplo, la vida de otras personas, pero, ¿qué pasa? siempre han sido los vencidos de la historia. En este sentido, la libertad, el libre albedrío es solo una falacia, una ilusión, una mentira jamás realizada, una realidad que se nos inventó para tener un poco de esperanzas, para tener algo en qué ilusionarnos. Todo es tan oscuro que mi estómago se aprieta, mi cuerpo reacciona y cómo no hacerlo, si no tengo más que razón y cuerpo.


miércoles, 23 de junio de 2010

Tratado de la libertad


Después de leer un poco esta tarde para despejar los pensamientos me detuve a pensar en los universales, está muy claro que pensar en ellos como verdad absoluta sería muy idealista de mi parte, por ende, me pareció interesante de parte del filósofo inglés John Locke hablar de tipos de universales, es decir, de cómo llevamos estos universales a lo concreto, a lo tangible. El habla específicamente de la Libertad. Es difícil coincidir en una percepción o concepción que cada individuo posee de esta, mas, sin llegar a acuerdos hipócritas y forzosos, estamos de acuerdo con Locke que en lo más profundo de nosotros la deseamos como parte de una naturaleza propia, genética. Lo que no concordamos, con estas perspectivas contractualistas y eurocéntricas, es que esta necesidad del ser humano, por alcanzar tan cuestionado universal, sería parte de nuestros ideales modernos, de nuestro cambio de convicciones que devienen con el espíritu absoluto de la historia, del progreso, del iluminismo racional, del hombre blanco y su cultura ilustrada, yo sinceramente me atrevería a decir que como especie hemos nacido o estamos destinados a ser libres, a morir o matar si es necesario por la libertad de ser.
Hoy en día, al parecer, en este mundo que oscila entre la modernidad y la posmodernidad, nos cabría la leve (o desmesurada) impresión de que la libertad es cualquier cosa menos lo que es. Sumisos y sometidos cumplimos con nuestras obligaciones, peleamos por alcanzar un puesto “favorable" en nuestro querido sistema, sistema que pareciera nadie gusta mucho de él, pero aun así disfrutamos de sus múltiples beneficios plásticos, libertades individuales. Sonrientes queremos aplastar al otro, extasiados daríamos la vida por gritarle al mundo que somos felices, que tener un auto es mejor que tener dignidad, que los líderes son un poco imbéciles, pero, ¿qué importa?, si somos todos estúpidos, unos estúpidos civilizados… modernos, distinguidos animales de cuello, corbata y tacones destruyendo todo a su paso.